viernes, 7 de febrero de 2014

ISLA DEL SOL - LAGO TITICACA

Desde UYUNI tomamos un bus hasta la ciudad de La Paz, son 12 horas de viaje, pero lo hicimos a la noche, por lo cual no se sintió tanto, aunque debo admitir que el bus se mueve bastante durante el viaje en ruta! el pasaje cuesta $B 100. Una vez en La Paz, compramos en la terminal un bus con destino Copacabana, son aproximadamente 3 horas y media de viaje y cuesta unos $B35. En Copacabana hay una oferta interesante de hostels y opciones gastronómicas variadas, ya que es un lugar sumamente turístico ya que allí se encuentra la bahía que da paso a la Isla del Sol, nuestro próximo destino.
Dicha bahía está ubicada a orillas del Lago Titicaca, el lago nabegable más alto del mundo y el agua es azul cristalina, es un placer estar allí
Sabíamos que para cruzar hacia la Isla del Sol debíamos tomar un barco que salen 8.30 o 13.30, y al llegar a Copacabana te invaden las compañías para cruzarte, así que luego de preguntar tres precios escogimos el más económico y por $B15 cruzamos a la Isla. Lo que no sabíamos era que teníamos que optar entre sacar un pasaje con destino a la Isla Norte o bien a la Isla Sur. Teníamos muy poco tiempo antes de que el barco zarpe por lo tanto tratamos de informarnos rápidamente sobre cada una de ellas, los lugares a visitar parecían más interesantes en la Isla Norte así que optamos por este último, luego detallaré la experiencia. Nos tocó un día de intensas lluvias y no íbamos preparadas, ya que se largó a llover de un momento para el otro, con granizo incluido así que nos tuvimos que aguantar el calzado y ropa chorreando agua durante las 2 horas que demora el barco en llegar, así que recomendamos llevar una capa de lluvia a mano en sus mochilas porque por estas zonas y en verano son común las lluvias esporádicas. Recuerdo que las escaleras por las que teníamos que transitar obligatoriamente hasta llegar al barco literalmente no se veían del barro , porque ya no era agua lo que las recorría, sino barro, tomando la apariencia de una cascada y lo más gracioso de todo esto fue que luego de 20 minutos de catarsis diluvial, salió un sol que rajaba la tierra, y que me vino bien para armar una especie de cuerda de colgar la ropa en pleno barco aprovechando el viaje hasta la Isla.
En el lago Titicaca se encuentra un grupo de indígenes llamado Aymara, que hablan su propio idioma entre ellos y a su vez, en la Isla viven principalmente del turísmo, del cultivo y de la pesca. Cultivan Aba, Oca y Papa y por lo general cada familia de la Isla tiene asignada una parcela de tierra que trabajan y viven en la Isla Norte unos 4.000 habitantes. Al llegar, te esperan los dueños de las casas para ofrecerte una habitación, son bastante precarias pero la ventaja es que son muy baratas, la noche nos costó $B 25. Como otra particularidad, el agua se calienta a través de paneles solares en la Isla por lo tanto no salia tan caliente como quisiera y en la noche refresca muchísimo por lo que hay que llevar abrigo.
Me cruce con un profesor de geografía al llegar a la Isla y me explicó que los cerros tienen formas diferentes y que son más ovalados debido a que antiguamente el lago era un glaciar y su forma se debe al deshielo de dicho glaciar, muy interesante la información.
A espaldas del puerto hay una especie de "Playa" con la arena rodeando el lago Titicaca, invitando a los visitantes a armar fogones, rondas de guitarra y muchos a pasar las noches en carpas, el ambiente es juvenil y cálido.
Para que te hagas una idea del color cristalino del agua te dejo esta imagen:
Al día siguiente, decidí visitar el Laberinto del Inca. Me habían dicho que para llegar debía bordear la playa y allí encontraría un camino que al seguirlo y después de una hora de caminata me llevaría al Laberinto. La cuestión era que por una extraña razón había madrugado, supongo que se lo atribuyo a la ansiedad que me generaba estar en el lago Titicaca y tener tan poco tiempo para recorrerlo, así que no andaba ningún visitante por la vuelta a esas horas, y seguí las instrucciones hasta encontrar el principio del camino de piedra.
El camino es sumamente disfrutable sobretodo por los paisajes que al irlo transitando se va empinando permitiendo una vista panorámica. En el medio hay que abonar un ticket que son $B10, pero valen la pena.Siempre me pasa lo mismo, y este lugar no fue la excepción, que disfruto más del camino que del resultado final o de lo que hay para ver allí arriba.
El camino no está señalizado en un cierto punto se bifurca, yo tomé el lado derecho y caminé alrededor de 40 minutos, hasta que me di cuenta que no era el camino, además que en cierto punto iba caminando al borde del precipicio y con muchos insectos a mi alrededor, así que volví al punto de división para tomar el lado izquierdo y luego de media hora me encontraba en los puntos arqueológicos que me habían recomendado: Piedra Sagrada, Templo del Inca, Roca Sagrada, Mesa de Sacrificio y el famoso Laberinto (Chincana), uno al lado del otro, concentrados allí, en la cima. No voy a mentir, me desilusione bastante, al ver una mesa de piedra, una roca gigante pero en definitiva iba con expectativas y eso está mal. Y sobretodo porque tiene una leyenda detrás que es lo que hace rico e interesante el lugar. Por allí dicen que en la mesa se sacrificaba a aquellas personas que hacían el mal, pero debo investigar un poco más sobre las distintas leyendas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario